jueves, septiembre 19, 2013

No me importa...11 de septiembre de 1973

Ha sido una de las palabras que ha determinado varia de mis posturas en los últimos años... de verdad hay temas que no me importan, y me importa que no me importen. Como me dijo una amiga hace un tiempo atrás, que por cosas de la vida hoy solo somos buenos conocidos: debes tomar parte y posicionarte en algún lugar con respecto ha ciertos temas. Le costo la relación ese consejo... De verdad hay cosas que no quiero que tengan importancia en mi vida, y por lo mismo no me importan, no es simple apatía o indiferencia, hay temas por ejemplo que son sensibles para mi y que por eso he preferido decir: "no me importa". En esta época y días se ha hablado mucho de los 40 años desde el régimen militar y he escuchado y leído varias postura...básicamente 2, la mía es de "no me importa" frente al tema, y me he mordido varias veces la lengua antes de decir algo frente a comentarios con tanto odio y desinformación. Muchos no lo saben y lo que no puedo decir lo escribo, mis abuelos fueron tomados detenidos cuando uno de mis padres y mis tíos eran pequeños, quedando solos en la casa con un promedio de edad de 10 años, no teniendo que comer, viviendo de la caridad de los vecinos mientras mi abuelo era torturado y golpeado por pensar distinto, y por falsas acusaciones de una vecina mal intencionada. Difícil situación cuando te toca de cerca, cuando tus cercanos se ven afectados. Estas lineas se entrelazan con un escrito anterior llamado "decisiones". Las cuales eran dos, tomar el tema como algo personal y fundar y radicar un odio tan profundo frente a la situación, que hubiese sido justificado y avalado por los hechos, y la otra como un mecanismo de defensa un tanto mas disfuncional: apoyar lo sucedido por diversos motivos que hasta el día de hoy no existe claridad si era de responsabilidad de la Unidad Popular o provocados por los mismo opositores. Odio no siento, siento perdón por los agravios cometidos, justos o injustos, eso le queda a Dios. Nadie tiene el derecho de hacer sufrir o hacerle daño a otro hijo de Dios, es lamentable dicha condición. No exijo justicia, exijo perdón por parte de los afectados, es difícil, pero es lo mejor y lo mas sano para sus almas. Suficiente por hoy..

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